Los primeros años de vida son los más importantes para el crecimiento de niños y niñas. El desarrollo emocional, social y físico en la primera infancia tiene un impacto directo en su futuro y bienestar como adultos, por esto es muy importante comprender y atender las necesidades en esta etapa.
En Sigmón, brindamos una práctica psicomotriz desde el modelo Aucouturier que se acerca a cada niño y la niña a través de respetar sus necesidades, su manera de ser y expresarse. Nuestra intervención se centra en observar, analizar y atender la globalidad de los niños y las niñas, es decir, los aspectos motores, afectivos, psíquicos, sociales, somáticos y cognitivos a través de la expresión y lenguaje del cuerpo para así poder facilitar las herramientas necesarias basadas en el movimiento y acciones que intervienen en el desarrollo de los procesos madurativos, en la constitución del yo, los procesos de diferenciación y de integración, así como, la reorganización de los afectos y del pensamiento.
De igual forma trabajamos la resolución de conflictos, angustias, miedos y frustraciones a través de la vía sensoriomotora. La intervención puede ser individual o grupal dependiendo de las dificultades de cada niño y niña y respetando sus ritmos de desarrollo.
Nuestros servicios son a través de un dispositivo espacial y temporal que permita: